martes, 17 de agosto de 2010

Teoría de los números primos

El nombre no existe com tal sino que se lo he puesto yo en base a lo que ocurre con los numeros primos. La aparición de los números primos no sigue una secuencia lógica ni predecible y el empleo de los premios en aprendizaje animal sigue un patrón similar cuando hablamos de propietarios con poca pericia como educadores.

Lo primero que suelo recomendar a los propietarios es diseñar una piramide motivacional, poner en lo más alto lo que más puede motivar al perro e ir bajando peldaños (queso, jamon, un juguete, unas palabras de animo...). Que suele ocurrir? en algunos caso que muchos propietarios no saben que motiva a sus mascotas, tampoco saben motivarlas ni buscar nuevos motivadores. Y otro aspecto básico y que echa por tierra un buen trabajo es el empleo de los premios de forma indiscriminada y sin ningún criterio y peor aún, premiando de forma incorrecta conductas de las que no somos conscientes. Por poner un ejemplo: el perro pone la cabeza encima de las piernas cuando comemos y le damos algo para que nos deje tranquilos (premio con forma de alimento), o lo apartamos (premio social, contacto). El alimento puede ser un factor motivacional muy importante (dependera el tipo de alimento tambien), pero en este caso reforzaremos que el perro repita esa coducta tan indeseable.

Ahora llega la parte práctica: cuantas veces al dia ofrecemos un premio del tipo que sea, en que situaciones y que conductas estamos reforzando?

Ahora podemos darnos cuenta de como desperdiciamos a lo largo de un dia cientos de oportunidades de premiar conductas deseables, como usamos estos refuerzos en conductas que no nos interesan o en el peor de los casos conductas indeseables. Por desgracia el hombre tiene por habito no premiar conductas provechosas pero si castigar aquellas erroneas (eso si, sin enseñar nada en cotraprestación). Esto tiene lugar no sólo con sus mascotas sino con lso empleados, con lso hijos, con la pareja... no solemos decir que bien hecha esta la cama al niño (damos por supuesto que el lo sabe), que bien cocinas (a nuestra madre), muy bien trabajo (a un compañero de clase) ... pero cuando algo sale mal es otro cantar, falta tiempo para hablar.

No hagais como los números primos, seguir un criterio lógico, establecer una base para el empleo de lso refuerzos y no desaprovecheis tantas oportunidades con vuestras mascotas y con vuestra familia, amigos y compañeros del trabajo.

1 comentario:

  1. ¡¡Fantásticas las publicaciones que estás haciendo!! Sin duda no tienen ningún desperdicio.Los que tenemos y amamos los animales nos enseña mucho sobre este mundo tan apasionante y poco conocido como es el de la conducta y comportamiento animal.Te doy la enhorabuena y animo a que continúes con tu buen trabajo.

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